El Universal / 24 de octubre 2020
Los municipios mexicanos constituyen la microestructura del sistema democrático al ser el epicentro de los grandes cambios que han trascendido a la macroestructura y que han transformado al edificio del Estado gubernamental en su totalidad.
Es en los gobiernos municipales y estatales donde la sociedad se apropia de las instituciones democráticas y forma las alianzas que ponen en marcha planes de desarrollo y de inversión.
De ahí la trascendencia de las ejemplares jornadas electorales que el pasado domingo protagonizaron los estados de Coahuila e Hidalgo y que lograron convocar a las urnas a casi dos millones de ciudadanas y ciudadanos para elegir diputados locales y ayuntamientos, respectivamente.
En ambas elecciones el Partido Revolucionario Institucional (PRI) ha recibido el apoyo mayoritario de la ciudadanía en lo que constituye un voto de confianza y de apoyo para consolidar a ambas entidades federativas como polos de desarrollo y de bienestar familiar.
El PRI compitió con candidatos propios, sin alianzas ni coaliciones, postulando propuestas claras y proyectos bien organizados, no ocurrencias ni improvisaciones que ya sabemos a dónde conducen.
El gobernador de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme Solís, ha encabezado un gobierno responsable, atento y eficaz en la respuesta para atender la emergencia sanitaria y convocar a todos los sectores para la recuperación económica de la población. Es Coahuila un ejemplo de gobierno cercano a la gente y de seguridad pública.
Por su parte, Omar Fayad Meneses ha liderado oportuna y visionariamente la política pública de salud y apoyo económico a la población que ha colocado a Hidalgo en la vanguardia de la atención integral por el Covid-19.
El PRI demostró capacidad de organización, postuló las mejores propuestas, garantizó cohesión al interior y al exterior y demostró voluntad férrea por responder a la población a través del servicio público, lo cual brinda confianza a las y los mexicanos de que es un partido responsable.
En ambos estados la ciudadanía ha respaldado a los gobernadores, ayuntamientos y legisladores emanados del PRI porque se han caracterizado por emprender acciones de gobierno en favor de las y los mexicanos, al tiempo que ha castigado a quienes negligentemente han apostado por la polarización y la división a costa de la salud pública y del crecimiento.
Las jornadas del 18 de octubre pasado constituyen un precedente invaluable para los procesos electorales federal y estatales que están en marcha y cuya jornada electoral será el 6 de junio de 2021, pues los cuidados que se tuvieron al exterior e interior de las casillas instaladas fueron ejemplares al garantizar el distanciamiento social y aplicar medidas preventivas como el uso obligatorio de mascarilla y aplicación de gel sanitizante.
El PRI acata estos nuevos mandatos con compromiso y claridad en las necesidades sociales y económicas de la población, a la cual le garantizamos proyecto, firmeza y responsabilidad en la acción de gobierno.
Porque el PRI está con México, México está con el PRI.
Presidente Nacional del PRI