Acento Noticias / 4 de noviembre 2020
CHIHUAHUA, por lo menos la capital no había registrado una psicosis colectiva de tal impacto como la que ocurrió hace diez años, cuando en las nacientes redes sociales digitales, se advertía que grupos de crimen organizado dispararían contra todo lo que se moviera por las noches.
Desde luego que se trató de una información falsa e irresponsable que alguien lanzó a través de Internet, originada ciertamente por el gran número de asesinados ocurrido en las calles de la capital y otros municipios.
El lunes, alguien o algunos lanzaron a las redes sociales un documento supuestamente con información oficial, en donde advertían de nuevas medidas restrictivas ante los contagios y muertes originados por la pandemia, incluyendo un toque de queda para todo el Estado.
Y aunque el documento resultó falso; pues simple y sencillamente ningún Estado puede declarar toque de queda, hubo miles de chihuahuenses que se abarrotaron en los súper mercados, para abastecerse de víveres, de alcohol y medicamentos básicos.
Cientos en largas filas por el “toque de queda” y el “cierre” de supermercados los fines semanas. Veremos en 15 días cuántos contagios generó el chistecito de algún ocurrente.
EL GOBIERNO del Estado en esta forma no eficiente de comunicar, salió varias horas después, a decir que el documento era falso, sin embargo, ha guardado silencio sobre las nuevas restricciones, pese a que las filas en los centros comerciales continuaron hasta entrada la noche.
De hecho en el mar de especulaciones y ante el silencio oficial, se llegó a decir que el documento falso se originó desde Palacio de Gobierno, para medirle a las nuevas restricciones, lo que no sería una errónea estrategias, pero si perversa.
Este día, se ha dicho que las a las 8:00 horas, se dará un nuevo decreto o la ampliación de los actuales, no para que especular más y agravar la psicosis social que a nada lleva; es mejor esperar, la información oficial, que aunque tardía no deja de ser oficial.
EN FIN, desde pueblo chico, infierno grande, llevó la denuncia de que el negocio central del Presidente municipal de Rosales, José Ramírez Licón, lo cacharon vendiendo alcohol fuera de horario y en plena Ley Seca.
Nos cuenta que por ser la primer autoridad, se sintió con derecho de vender alcohol en la confianza de que es pueblo chico, en donde prácticamente todos se conocen.
El problema es que, alguien dio aviso a gobernación estatal y le clausuraron el negocio, pero extrañamente con una llamada al secretario general de gobierno, Luis Fernando Mesta, el acta de clausura fue retirada y el negocio volvió a funcionar.
No se sabe si el alcalde Ramírez Licón, es muy cercano al funcionario estatal, o influyó su origen morenista. Cosas del tráfico de influencias dentro de esta longeva pandemia.
FEMÍN Ordóñez, nos reportan anda como niño con juguete nuevo, pues logró integrar su plantilla de regidores, en su intención manifiesta de buscar la presidencia municipal de Chihuahua, por la vía independiente.
Una intención que tiene varios bemoles, el primero es que si realmente va por la vía independiente, o está creando una marca, una candidatura para ofertar al mejor postor, lo que es válido.
Pero lo que no es fácil es ir por una candidatura independiente que requiere de entre siete y 10 millones de pesos. Cifra que ningún padrinazgo político quisiera tirar a la basura y menos en estos tiempos pandémicos.
O si trae mucha lana, no propia desde luego, o pretende simular como lo hacen algunos partidos familiares, y quedarse con un par de millones que destinan el IEE, para los independientes.
Por lo tanto Fermín Ordóñez debe de transparentar el origen de sus recursos propios y financiadores para luego aspirar a lo que quiera. Su trayectoria política no le da para nada, salvó que un pez muy grande y grande, así como un tiburón esté atrás, claro en el tema de los malditos dineros.