La Visión de Chihuahua / 10 de diciembre 2020
En un Congreso sin identidad política, donde el grupo mayoritario está compuesto por apenas la tercera parte de los 33 diputados que componen la Legislatura y encima divididos a causa de profundos desencuentros partidistas, la segunda fracción sin liderazgo interno ni sentido de la responsabilidad y un variado número de diputados dominados por intereses personalísimos, para el coordinador de la menguada mayoría, Fernando Álvarez Monge, es un dolor de muelas hacer consenso legislativo en iniciativas de ley y asuntos de interés para el Ejecutivo.
A ese Congreso sin identidad política llegó el asunto más importante al cierre de la administración Corral; la solicitud para que le sea autorizado contratar un crédito por 1,600 millones de pesos. Más que importante, el préstamo es vital, las finanzas del Gobierno Estatal están a tal grado deprimidas que sin ese dinero les resultaría imposible cerrar el año fiscal. Así de urgente.
¿Preocuparía el colapso financiero del Gobierno a los diputados del Morena, del PT, del Verde, de MC, del Panal? Absolutamente no, es en lo último que piensan. Si acaso al PRI, partido cuya tradición está formada en el poder. Ellos saben lo que significa gobernar y por tanto tienen cierta conciencia de sus responsabilidades. Pero el resto suele resolver el sentido de su voto en oscuras negociaciones, usualmente acompañadas de dinero u otras prebendas.
Imagine a Rubén Aguilar, al diputado Alejandro Gloria, del Verde, cuando Fernando Álvarez les pida su apoyo a la solicitud del crédito. Ya los veo: “y como de cuanto estamos hablando, Fernando. Ya sabe, diputado, De 1,600 millones de pesos, es lo que necesitamos para cerrar. No te hagas el chistosito, ¿De cuánto estamos hablando nosotros?. Es mucho dinero para seguir endeudando al gobierno…” Y Fernando no tendrá más que implorar comprensión y pedirles que no se dejen caer, recordándoles que no hay dinero ni para la nómina del Congreso.
Sabemos de qué forma conseguirá Fernando Álvarez los votos suficientes para el crédito, pongamos que la negociación mercantilista es una costumbre bien consolidada en la presente Legislatura. Javier Corral y Fuentes Vélez recibirán su dinero a tiempo para Cerrar el año, pero no habrán resuelto absolutamente nada, sólo prorrogarán la crisis.
El barullo de la inmediatez política, por el proceso electoral, nos tiene embobados, pero los grandes problemas de Chihuahua amenazan el desarrollo económico del la entidad como nunca en los últimos quince años. Hablamos de inseguridad, el colapso de Salud y las finanzas deprimidas al punto de quiebra técnica. Son los asuntos que debería estar atendiendo Corral en estos momentos.
Y específicamente, sin sombra de duda, serán las finanzas estatales el mayor reto para el nuevo gobernador(a), cualquiera que asuma el cargo. Es tiempo que tengamos un jefe del Ejecutivo responsable y eficiente en su actuar. Estoy seguro que Fuentes Velez llegó con la mejor disposición para resolver o al menos contribuir a la solución de la crisis financiera que dejó Duarte, pero claramente no era el más calificado. Quedó rabón, muy rabón.
Y de Corral ya sabemos, ni al principio, ni en medio, ni al final de su administración estuvo atento a ese problema, a lo más firmó las solicitudes de crédito, cada que le urgió su secretario. Él con su Justicia para Chihuahua quiso arreglar todo. Ahí están las consecuencias de la desatención; Al cierre de la presente administración, en la proyección que va, la deuda del estado rondará los 65 mil millones de pesos, la más grande de las 32 entidades federativas, con relación al presupuesto estatal, sin contar la decadencia de Pensiones Civiles, el pasivo magisterial y otros huecos que la sangran.
Rompeolas
Apenas ayer publicó el PAN la Convocatoria para elegir candidato a gobernador y hoy empezaron las versiones de que personal de la administración estatal –Junta de Aguas, Educación, Recaudaciones de Rentas y otras dependencias- se volcaron para conseguir las firmas requeridas a favor de Gustavo Madero, con artimañas desleales contra la alcaldesa Maru Campos. ¿Asistimos a una elección de Estado? Eso parece. Javier Corral y Gustavo Madero han hecho, sin éxito, hasta lo imposible por bajar a la alcaldesa de la contienda por las malas, nada extrañaría un esfuerzo coordinado para que los trabajadores del gobierno se movilicen consiguiendo firmas, un pecadillo más. Lo que siempre y en todas partes condenó Javier Corral de los gobiernos priistas, está haciéndolo ahora que desempeña el importante cargo. Hágase la justicia, siempre que sea en los bueyes del compadre. Mientras más cochupos hagan más complican la elección, ya de por si muy confrontada.
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Por cierto, la Convocatoria llegó con un par de darditos envenenados. Deja abierta la posibilidad para el registro de candidatos externos ¿Últimos esfuerzos por convencer a Alejandra de la Vega? Y aclara que el proceso de selección podría ser detenido si el PAN firma alianzas con otros partidos. ¿Buscando la forma de un dedazo limpio y puro, en la eventualidad de que no les alcance con la militancia? Maru registra su precandidatura el domingo 13, un paso más en la difícil carrera. Ya en calidad oficial de precandidata ¿Se atrevería Javier a proceder legalmente contra ella?. Se me hace muy ojona para ser paloma, pero con éste cuate no se sabe.
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El Pony Lara presentó se renuncia a la presidencia de la Junta Municipal de Agua, anunciando que va por la candidatura a Presidente Municipal ¿Resueltas las diferencias entre los aspirantes recargados en la dupla Corral-Madero? Probable, veremos como se compartan el resto de los aspirantes en los próximos días. Aunque hay más, debemos esperar a que se resuelva la disputa por la gubernatura, pues como todos saben, de la candidatura mayor dependen las menores. Así que calma, las definiciones están llegando a su punto culminante, pero todavía falta.
