Agua, pretexto para castigo -Sin agua, sin policía, ni dinero, qué sigue -Cuerda tibeteaba de Conagua- AMLO barre de abajo para arriba

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Acento Noticias / 25 de septiembre 2020

POR DESGRACIA, o porque así se planeó, el conflicto en la zona centro sur agua y la muerte de la agricultora Yéssica, ahora son pretexto para escalar a un problema político de confrontación de amplio espectro, en donde las causas originales se han borrado.

Desde luego que no se trata de una casualidad pues en política no existe; ya no es el agua, ni Yéssica; ahora son acusaciones, gritos y represalias contra Chihuahua, contra gente inocente a quienes como los productores se les congelaron las cuentas bancarias, al igual que al Municipio de Delicias.

Sencillamente se traduce en una parálisis financiera para el pagó de nómina, proveedores y servicios, hasta ellos llegó el chicotazo de la venganza e ira presidencial.

Desde luego que desde el Gobierno del Estado, se reconoce la represión del centro y se ha dado respuesta verbal, y hay que reconocerlo, pero también con las bravuconadas, piquetes de nariz y sacadas de lengua, no se le puede hacer daño a la CuartaT, es más ni a mentadas de madre, si las hubiera.

Del agua, entonces, se pasó a la confrontación política, la que llevó a la descoordinación entre los cuerpos de seguridad federal con los estatales y luego, de hecho ya se anunció, vendrá un recorte importante en las participaciones federales, para el 2021.

No hay que ser adivino, el conflicto por el robo del  agua de los chihuahuenses, va alcanzar el proceso electoral del 2021; en 90 días ya habrá candidaturas y estaremos en otro escenario.

No habrá solucionado el problema de origen continuará, en estas circunstancias en la que los gobernantes se llevan a los ciudadanos entre las patas de los caballos. Ya nada será igual; van el poder, eso es lo que le importa a la soberbia oficial.

POR cierto que sin deberla no temerla, los técnicos de la Comisión Nacional del Agua, los mejores se había prometido y no lo dudamos, hicieron la medición de la profundidad del agua de la presas y almacenamiento con una cuerda de plástico y un trozo de metal para que llegara al fondo.

Esa es la Batimetria, o medición de profundidades, hecha en Chihuahua a la antigüita sólo ellos sabrán los números que le arrojarán la cuerda y el trozo de metal y a cuantos metros equivale el estiramiento de los brazos para contar.

Por cierto en sus mediciones de alta tecnología no invitaron al Gobierno del Estado, a cómo andan las cosas no se esperaba otra cosa, pero tampoco a la dirigencia de los productores, aunque hay que decirlos, los agricultores estuvieron pendientes de los numeritos.

Qué va a compartir a Chihuahua, seguramente nada, qué van a reportar a México; cómo van a llenar el informe técnico, científico de la Batimetria, tampoco se sabe.

Tendrían que preguntarle a la soga “tibetana”, como aquí en un programa  de radio, le preguntan a una moneda y hasta el futuro le responde, a quien pregunta, claro.

Difícilmente esta medición artesanal va a solucionar, es más ni allanar, el conflicto por el agua, la secretaría de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, falló de nuevo.

DE ÚLTIMA hora se confirmó la renuncia de seis subdirectores de la Comisión Nacional del Agua, los que anunció en la mañanera el presidente, Andrés Manuel López Obrador.

A todos los llamó panistas desleales (infiltrados). Desde luego no tenemos su datos, pero lo que si se conoce que el subdirector general, envío el agua de Chihuahua o parte de ella a Tamaulipas para favorecer a un compa multimillonario y líder productor, quien será el candidato a gobernador, salvó  que el presidente lo baje. El nombre lo borraron, pero es morenista.

Es el mismo que comercializó el agua de Chihuahua y Coahuila para un empresario industrial de Nuevo León, de Poncho Romo.

No sabemos por ahora hasta dónde va a llegar las renuncias, lo único que se oficializó es que la directora de la Conagua,  Blanca Jiménez, permanece por ser amiga personal,  como ahora se dice personal de ALMO.